Hoy vi un poeta tan perdido,
como yo, solitario bailando
en medio de una pista, sin sentido
ni razón de ser, desgraciando
lo que él es
En sus ojos creía alguien prestaría
su atención, sin saber que solo yo vería
que allí había un poeta.
Sólo un poeta sabe reconocer a otro
solo un lobo solitario sabe encontrar a otro solitario
Pero no me le acerqué aún necesitando
amigos como yo, en el exilio,
preferí abandonarle y dejarlo andando;
me hubiera clavado la daga sin venir en mi auxilio
Como lo hacen todos
Abandono al poeta y al vagabundo,
abandono al honesto y al inmundo,
abandono todo y todos
pues todos portan la misma Mancha
que los hace humanos
y los hace traidores.
L.
No olvideís como traicionasteís a Aquel en lo Alto, en su propio Jardín.