martes, 29 de agosto de 2017

THE UNION


Sueño con justicia inmisericorde
Los monstruos castigados y llorando
Sus corazones se apagando
Lentamente al paso de mi acorde

Gremios enemigos de los que trabajan
Al estudiado y al competente odian
Su latrocinio se extiende a las arcas del gobierno
Y a las almas del averno
Que alimentaron sus obras sociales
Plagadas de robos y males

Aportes patronales equivalentes al doble
Pudrieron desde adentro el roble,
Cuyas ramas eran numerosos nidos familias
De valerosa desarrollada potencia
En una endogamia podrida de incompetencia

Pocas familias comen de lo público
Nido de serpientes nepotistas
Podría ser un río donde muchos beben
Familias que nada deben
En alegría y abundancia
Son relegadas al odio y la ignorancia

Son la basura de esta Argentina
Enemigos de Perón y los trabajadores
Resentidos, maleducados y odiadores,
Qué tan negro es un corazón que roba
A los enfermos y a los moribundos un lujo más para su decadencia

Es una horda de saqueadores y alabadores
Siguiendo un cacique en sus correrías
Han cambiado los tiempos más no las fechorías

Basta recorrer los pasillos donde tanto dinero no llega
El agua que cae y la mugre que sube
Los reglamentos caídos en oídos voluntariamente sordos
Y aquél orgullo payasesco y sombrío
Que se pasea en sus rostros de impunidad y violencia
Entre ojos amenazadores de poca sentiencia
Creyéndose justos, correctos y justificados
Dejar morir los inocentes, hambrear a los pobres y excluir a los discapacitados

Poco es el miedo que inspiran estos monstruos de opereta
Saben asustar las ovejas, al ignorante y al berreta,
Su leve hombría se asusta y asombra
Entre aquellos hombres cuya sombra
Se pasea sobre gotas y rastros de sangre
Aquellos hombres que le rezan

A la Santa Muerte.

Nemo me impune lacessit

L.